domingo, 19 de abril de 2009

Volando en una brisa de trompetas

Todo está conectado. Lo mejor y lo peor de mi vida ha llegado por casualidad.
De alguna forma me siento así, eso fue lo que pasó por mi cabeza el viernes. Mientras estaba envuelta en un música especial recordé la historia del maestro zen, que escuché hace tiempo en una película:

Al cumplir los 14, a un niño le regalan un caballo. Y todo el pueblo exclama: "¡Excelente!"
El maestro zen dice: "Veremos". Tiempo después, el niño se cae del caballo, se quiebra la pierna... y todos dicen: "¡Qué terrible!" El maestro zen dice: "Veremos". Luego empieza la guerra... pero el niño es inválido y no tiene que ir. Todos dicen: "¡Estupendo!"
... Y el maestro zen dice: "Veremos".

La película (La Guerra de Charlie Wilson) no me gustó mucho, pero me pareció que la historia estaba bien elegida.



Que si el azar nos va empujando hasta el final
Solo habrá casualidad

La casualidad
Nos va a alcanzar
Nos va a salvar
Y a matar
Iván Ferreiro

6 comentarios:

cris dijo...

Ya te digo si tiene razón el maestro Zen... me lo voy a tatuar en la frente, a ver si espabilo de una vez jajajajaj

bea dijo...

mi madre es un maestro zen y que tengo que enterarme así¡¡¡¡

jajajajja

Anónimo dijo...

..jajaja, me rio del comentario de bea, pero es verdad que las madres suelen tener un poco ese espiritu (y luego decir - por lo menos la mia - ya decía yo...)

yo justo he hecho un curso hace poco en el que decian que casualidades no hay ninguna, que todo viene a ser terriblemente casual

besos
pd: de lo de ser adulta pufff... tampco creo que nos perdamos mucho, sinceramente. :)

elena

Ezne dijo...

Las casualidades... Para mi no suelen existir... Cada paso te lleva a otro paso.

Esa historia me gusta porque yo también la creo!

Un beso

Melómana dijo...

Uy Cris, como nos tengamos que tatuar en el cuerpo todo lo que no se nos tendría que olvidar, a nuestro lado el de memento iba a ser un principiante...
Bea, me haces dudar. No sé si es cosa de padres o de gallegos. Mi padre habría dicho "el tiempo lo dirá".
Elena, me ha recordado el comentario a una canción de Bunbury: "de pequeño me ensañaron a querer ser mayor, de mayor voy a aprender a ser pequeño".
Ezne, eso es lo que yo creo también, que todo está entrelazado, es todo una cadena. A mí la teoría del efecto mariposa siempre me pareció bastante creíble.

simplementeyo dijo...

Bueno pues ya sabes... ya veremos. besos